lunes, 17 de enero de 2022

La señora Sísifo (Carol Ann Duffy)


 














Otra vez empujando la piedra cuesta arriba, testarudo.
Digo piedra, pero es grande como una iglesia.
Al principio, no era más que una molestia,
pero ahora me sulfura este asunto, y él, grandísimo boludo.
Quisiera clavarle un cuchillo.
Piensa en la plata, me dice.
¿De qué sirve la plata, le chillo,
si ni siquiera te das tiempo para descorchar un vino
o para ir al parque a caminar conmigo?
Es un cretino.
Desde lejos viene gente a verlo, expectante.
Creen que lo hace por extravagante,
por bromista, por pura diversión.
Por terrible huevón sería mejor dicho.
Lo mismo daría que fuera un pichicho
ladrándole a la luna…
En cuanto esa piedra del carajo
llega a la cima, rueda otra vez cuesta abajo
y vuelve a su cuna.
¿Y qué dice él?
¡Sin decaer!
Infalible como un halcón,
implacable como un tiburón,
¡Sin decaer!
Pero sola de noche en mi cama,
me siento igual que la mujer de Noé
cuando él martillaba y martillaba su Arca,
o como Frau Johann Sebastian Bach.
Mi voz reducida a un graznido,
mi sonrisa un gesto torcido;
mientras en la ladera se adensa la sombra,
y él entrega todo y más a su obra.



Traducción de Mirta Rosenberg y Lorea Canales


Mrs Sisyphus
That’s him pushing the stone up the hill, the jerk./ I call it a stone –it’s nearer the size of a kirk./When he first started out, it just used to irk,/ but now it incenses me, and him, the absolute berk./I could do something vicious to him with a dirk.// Thin of the perks, he says./ What use is a perk, Ishriek,/ when you haven’t time to pop open a cork/ or go for so much as a walk in the park?/ He’sa dork./ Folk flock from miles around just to gawk./ They think it’s a quirk,/ a bit of a lark./ A loadof old bollocks is nearer the mark./ He might s well bark/ at the moon –/ that fecking stone’s nosooner up/ than it’s rolling back/ all the way down./ And what does he say?/ Mustn’t shirk –/ keenas a hawk,/ lean as a shark/ Mustn’t shirk!// But I lie alone in the dark/ feeling like Noah’s wifedid/ when he hammered away at the Ark;/ like Frau Johann Sebastian Bach./ My voice reduced toa squawk,/ my smile to a twisted smirk;/ while, up on the deepening murk of the hill,/ he is givingone hundred per cent and more to his work.


domingo, 16 de enero de 2022

La primera vez que hablé con mi psiquiatra (Raquel Martín Caraballo)

 

















La primera vez que hablé con mi psiquiatra
fue por email.
Tengo que confesar que la temía.
Temo poderosamente a los psiquiatras
(recuerdo al inhóspito doctor Gordon
sacando a Esther Green
de su campana de cristal
y me estremezco con el desplome de la palanca
del electroshock).
Entonces elegí la evía
para no verme demasiado obligada
a temerla tanto
(ya se sabe que a un click de distancia
las cosas se sienten distintas).
Esperé una respuesta fría y formal,
algo así como: “procederemos, pues, a nivel terapéutico”.
Pero entonces, como una ligera brisa desde el acantilado,
aterrizó en mi Bandeja de Entrada un mensaje un tanto diferente:
“claro que puedo ayudarla”.
La segunda vez que hablé con mi psiquiatra
fue cara a cara,
aunque aún sin mirarnos a los ojos.
Tengo que confesar que la temía,
si bien el pánico había quedado reducido a un residuo controlable.
La tercera vez que hablé con mi psiquiatra
ella no dudó en poner sobre la mesa su cajita de Kleenex.
Tengo que decir que, en aquel justo momento,
el miedo me abandonó.



Del poemario No esperes nada.






martes, 11 de enero de 2022

Adán (Federico García Lorca)


 

 

 

 

 

 

 

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 

Árbol de sangre moja la mañana
por donde gime la recién parida.
Su voz deja cristales en la herida
y un gráfico de hueso en la ventana.
 
Mientras la luz que viene fija y gana
blancas metas de fábula que olvida
el tumulto de venas en la huida
hacia el turbio frescor de la manzana,
 
Adán sueña en la fiebre de la arcilla
un niño que se acerca galopando
por el doble latir de su mejilla.
 
Pero otro Adán oscuro está soñando
neutra luna de piedra sin semilla
donde el niño de luz se irá quemando.
 
 
 
Primeras canciones, 1922. 
Publicada en 1936 según nota en Obra completa de F.G.L. volumen II, Ed. Losada, 1938, octava edición 1961, de donde se toma el poema.
 
La foto fue tomada por Luis Buñel en 1925, Herederos de Luis Buñuel.
 

 

 

 

 

 

 

lunes, 10 de enero de 2022

hay palabras (Sergio Beleiro)

hay palabras
que al leerlas
tan juntitas todas ellas
tan raras y a veces 
tan indescifrables en sus giros
me llevan
a mirar las cosas de otro modo
y si no hay sentido que haya luz
o que la sombras se presenten con su nombres
o que con nombres cambiados 
se las reconozca
que una palabra dicha a medias
en un verso cualquiera
haga que el poema       
                         sea
aunque no se entienda
aunque tenga luz donde no quepa
o su sombra trague sangre y la escupa
detrás de otra palabra que quizás no sea escrita
nunca
            y venga 
después 
de alguna manera 
            otro poema


                             (febrero 2017 - enero 2022)